“NO ME DESPIDO”

He visto tus manos fuertes

trabajar la tierra de la vida,

acariciar el alma,

limpiar el sudor de tu frente.

Manos valientes sosteniendo al mundo,

peinando los cabellos de los niños,

cuidando siempre.

Admiro tus manos fornidas

ante el campo de batalla

arañadas por la espada candente al desafío

amando las horas, los espacios compartidos.

Rogué, lloré, grite por un instante

agazapada en la sombra que me habita

con las manos desnudas y los pies descalzos

y poder llenarlos de camino.

Entonces mi alma, infinito testigo,

puede ver como la víbora muerde,

después de todo la vida gira sobre sus goznes

solo hay que unir los trozos en cada suspiro.

Hermano, te beso la frente,

eres libre, sigue tu camino.

© Rafi Guerra 

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